Según el Ente Regulador de Servicios Sanitarios del Paraguay (ERSSAN), en el país hay más de 5.000 prestadores del servicio de agua potable, de los cuales el 87% cuenta con menos de 200 conexiones. Esto se conoce como atomización de prestadores y suele tener como resultado la heterogeneidad en la prestación, dificulta el acceso al financiamiento para realizar inversiones, entre otras consecuencias.
Una de las preguntas que se planteó fue: ¿cómo pensar la sostenibilidad en el largo plazo de los prestadores considerando las dimensiones económica, social y ambiental?
La propuesta que desarrolló el equipo fue lograr el agrupamiento de estos pequeños prestadores en un plazo de 2 años con planes de acción definidos.
El plan de acción incluyó: categorizar a los distintos prestadores de servicios de agua y saneamiento en función de datos de campo y con una sistematización de estos datos. Durante el proceso de trabajo, y como resultado de la interacción entre los participantes, se encontró que el Estado de Sao Pablo (Brasil), tenía un sistema ya desarrollado y perfectamente adaptable a las necesidades del proyecto.
Como segunda etapa, se propuso la agrupación de los prestadores, según sus características retomando conceptos y ejemplos de organización analizados en los Módulos de Justicia, Ética y Derechos Humanos en las Políticas Públicas y de Gobernanza y Regulación.
Las conclusiones incluyeron la necesidad de impulsar mesas de diálogo entre los distintos actores involucrados para abordar la situación y proporcionar espacios participativos de promoción de nuevas políticas públicas, con el fin de lograr cambios significativos que deriven en una solución concreta y viable.
